En la provincia de Burgos
Ordejón de Abajo, Septiembre 1997. Informante: María.
Humada, Septiembre 1997. Informante: Eladio. Esta canción pertenece a las copla que los ciegos vendían de pueblo en pueblo, acompañados de un rabel o una guitarra. La versión reproducida es la de Ordejón de Abajo, probablemente incompleta. Según Eladio, los violadores simulan encontrar a la muchacha cuando otro día van de caza y el padre sospechará de ellos.
En la provincia de Burgos,
muy cerca de la montaña,
había un hermosa joven
que a todo el mundo
envidiaba. (46)
Sus padres eran muy nobles,
queridos por todo el pueblo,
pero al fin acabó todo
con llanto y con desconsuelo.
Un domingo de mañana,
la mandan con el ganado
y la hermosa pastora
al pueblo no ha regresado.
La salieron cuatro mozos
y hacia ella se abalanzaron,
se la llevaron a un bosque
que era imposible pensarlo.
Allí la gozaron todos
y después de ejecutarlo
la meten en una cabaña
y la atan de pies y manos.
Desmayada con el susto
quedó solita en el bosque
y los traidores marcharon
llegando al pueblo de noche.
Se encontraron con el padre
de la desgraciada joven
y le dicen: “¿Dónde va?
Que ya se cierra la noche.”
Y le dicen los infames:
“Si quiere le acompañamos
y la buscamos todos,
cada uno por un lado.”
Luego se comunicaron
de llevarle desviado
desde el sitio que se hallaba
y con eso le engañaron.
46 La versión de Humada comienza así: “En la provincia de Burgos / muy cerca de la montaña / ha ocurrido un caso raro / que ahora voy a contarlo con gracia.” Desconozco el resto de la letra de la canción y, por tanto, las otras variantes que pudieran darse.
El día veinte de Abril
Ordejón de Abajo, Septiembre 1997. Informante: María.
El día veinte de Abril,
en dicho pueblo ocurrió
un crimen fatal y triste
que enternece el corazón.
Un joven de veintiocho años,
por nombre tiene Gabriel,
ha cometido este crimen
según lo dice el papel.
Con una joven muy rica
llamada Demetria Hernández
sólo por el interés
le hicieron casar sus padres.
Muy a disgusto Gabriel
con Demetria se casó
y aquel fiero criminal
pronto la muerte la dio.
Se celebró la boda
con grande acompañamiento,
amenizando aquel acto
la banda del regimiento.
A las once de la noche
terminaron de cenar
retirándose los novios
a su cama a descansar.
Entran en el dormitorio
y al quitarse las alhajas,
el novio como un león
a Demetria despedaza.
La arrastra de los cabellos
y desenvaina el puñal
cortándola la cabeza
el odioso criminal.
No se contentó con eso,
pues la quitó las alhajas
para irse a Buenos Aires
con su pícara criada.
Otro día de mañana
ya se levantaron todos,
y el padrino y la madrina
fueron al dormitorio.
Y como tardaban tanto
en levantarse los novios,
el padrino y la madrina
entran en el dormitorio.
Al ver allí una cabeza
separada de su cuerpo,
salieron muy asustados
llorando con desconsuelo.
Dieron parte a la justicia
y el juez vino sin tardar
a reconocer el crimen,
que dan ganas de llorar.
Pero los guardias civiles
al recibir la noticia,
marchan a San Sebastián
y les cogen enseguida.
Les echaron las cadenas
y a ellos les llevan atados,
se los presentan al juez
y ellos allí han declarado.
La criada declaró
que ella no sabía nada,
que marchándose a servir
él mismo se fue a buscarla.
Según tenemos noticia,
la criada fue causante
el que matara a su esposa
para irse a Buenos Aires.
“Mas ya que he sido cogido
por mi desgraciada suerte,
ustedes me juzgarán,
si yo merezco la muerte”.
También a los padres digo:
“No les caséis a la fuerza,
que si dan palabra a una
dejad que cumpla con ella”.
También a los mozos digo:
“Pensad lo que vais a hacer,
si no queréis a una novia,
no hagáis lo que hizo Gabriel”.
Maximino el Zapatero
Ordejón de Abajo, Septiembre 1997. Informante: María. Incompleta.
Maximino el zapatero,
natural de Villalafuente,
su profesión ejercía ,
y era en Renedo del Monte.
Con sus padres en Renedo
Perpetua Terram vivía,
diez y nueve años contaba
esta flor de Alejandría.
Este joven disfrutaba
de excelentes condiciones
y con Perpetua sostuvo
seis años de relaciones.
Por este acontecimiento
no se podía creer
que a tal extremo llegara
aquella falsa mujer.
Llamo falsa a esta doncella
y no es ella responsable,
que fue pícaro interés
del avaro de su padre,
que aconseja a su hija
que dejase al zapatero,
se casase con su tío
que tenía más dinero.
Tío carnal de Perpetua,
también cuñado del padre,
que aconsejaba a su hija
de asuntos tan favorables.
El infeliz zapatero
la negativa escuchaba
y el egoísta del padre
la partida le ganaba.
Maximino al darse cuenta
de lo que iba a suceder
a Perpetua le decía
«hija, ¿qué vamos a hacer?»
Se ha subido al campanario
a sentarse en la tronera
y dando el último adiós
de la torre se tiró,
y se quedó sin sentido
pero todavía no murió.
Le cogieron sus amigos
y a su casa le llevó
y a las cuatro la mañana
del día siguiente murió.